CIUDAD

AL ROJO VIVO

JESÚS CHÁVEZ JIMÉNEZ






La ciudad de La Paz, no sabe de tiempos políticos, ni cambio de regímenes, tampoco de siglas de partidos políticos, mucho menos conoce de estrecheces presupuestarias o atracos al tesoro. No lo sabe. Y además no tiene por qué saberlo. Por ello la Ciudad, solo espera de manera paciente, como lo está ahora, que se acuerden de ella, de sus carencias. Y vaya que son muchas. Y entre las más visibles, las más dañinas para su imagen, es la destrucción de las calles. Las que no fueron pavimentadas necesitan con urgencia, no el bacheo que ha dado resultados adversos, porque los hoyancos se hacen más grandes. No, baches no. Lo que se requiere es una reparación a conciencia. No se amigo lector, si ha caído en los grandes huecos que están por doquier,. De pronto siente usted en el alma la necesidad de gritar. Y si usted siente eso, imagínese lo que sentirá su pobre carro, que solo expresa un ruidoso quejido, que procede de las suspensiones. Otro problema es la semaforización. Vuelvo a decir que no hay muertes tan seguido en las calles. Porque diosito es muy bondadoso con nosotros. Hay semáforos que nos guiñen un ojo. O de pronto se apagan de un lado. Y de otro están encendidos. Hay uno en la Cinco de Mayo, que confunde. Se apaga y se prende. No sabe uno que hacer. Hay también semáforos que solo tienen el siga, pero ni el rojo, ni el preventivo. Y estos desperfectos tienen en vilo a los automovilistas que apenan salen de la zona de baches y se enfrentan a los semáforos destartalados. Y todo esto y muchas cosas más, duelen a la ciudad. La hermosa capital que está a la espera de que se inviertan en ella, los recursos necesarios para resolver sus dolencias. Y creo que poco le ha de importar si estos dineros provienen del gobierno federal, estatal o municipal. Nuestra ciudad solo espera resultados, hechos, atención. Y rechaza palabrería y demagogia. La espera sigue.

MORBO POLÍTICO

Una piscacha de morbo político brota cuando en las ceremonias trascendentes, los organizadores sientan codo con codo a Guillermo Mercado Romero y a Leonel Cota Montaño. Ya van más de cuatro ocasiones en que se da esta rispidez. Parecería una nimiedad, o a lo mejor hasta una tontería comentar esto. Pero sabiendo cómo se, la infamia cometida por Efraín Cota en contra de Mercado, que lo acuso de todo, pero no le comprobó nada. Solo sacio su venganza de manera brutal en contra de quien paradójicamente lo hizo político. Y que le diera todas las posiciones en las que cimento la llegada a la gubernatura. Y el pago dado, fue la persecución, la exhibición y el someterlo a procesos judiciales amañados y costosos. Y hoy que la historia los está juzgando,. A uno a Mercado, le ha dado un lugar en la sociedad a la que pertenece, con honor y con reconocimiento. Y al segundo, con el recuerdo imborrable de la devastación del patrimonio público y el retroceso de los doce años que gobernó, seis con su nombre y otros seis con la triste imagen de su primo, situaciones que están ahí, documentadas y clavadas en la memoria pública. Por eso, cabe la prudencia y que al menos los separen dos asientos, por lo menos.

VIDAS PARALELAS

Tuve la oportunidad de saludar en esta capital el pasado fin de semana al licenciado Alfredo Fisher Melgar. Este destacado profesionista es parte de esa generación que ha triunfado en otros niveles del servicio público. Ahora se desempeña como alto ejecutivo del SAT, con encomiendas muy importantes en los planos nacionales e internacionales. Y con éxito. Conoci hace muchos años a Alfredo y se de sus capacidades. Le deseo el mayor de los éxitos. Y le mando un fuerte abrazo…Como algo debe de hacerse para evitar que la recepción a los pocos visitantes sean las vacas pastando en la desviación al aeropuerto. Una bonita imagen, pero igual de peligrosa. No ha pasado un accidente, porque Dios nos cuida, pero hay todas las condiciones para ello…Carlos Lascurain Ochoa, es una excelente adquisición al gabinetazo de CMD. El ex director del centro SCT, sabe con amplitud lo que debe de hacerse en la Junta Local de Caminos. Hay mucho por hacer. Y se debe de hacer bien. Y Carlos, lo sabe… Y amigos, por hoy es todo. Nos leeremos mañana. Reciban como siempre un abrazo afectuoso. Y no olviden: hagan el bien y sean felices.

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