LAS CARTAS

AL ROJO VIVO

JESUS CHAVEZ JIMENEZ

No hay plazo que no se cumpla. Y el tiempo nos abre las puertas de par en par de la sucesión gubernamental. Como se dice en el argot de los buenos bebedores” Ya son las doce en  China” Es decir juego legal. Y fíjense que aunque no sea juego legal, se permite ya el proselitismo entre los suspirantes. Y se presta, porque no hay un árbitro que dé el silbatazo. El Instituto Estatal Electoral esta de que se va o no se va. Y el Centro arrogante, todavía no da señales de cómo se manejaran estos menesteres de los cambios en las gubernaturas y la renovación de las legislaturas federales y locales. Y aunque no nos distinguimos en eso del respeto por las leyes, sea lo que fuere ya estamos en esta fiesta a la que vamos todos, queramos o no. Y por ello ya están a la observancia del respetable, Estela Ponce Beltrán, Carlos Mendoza Davis, Ricardo Barroso Agramont. Son los tres que más fuerza demuestran, Y de los tres puede salir el que suceda a Marcos Covarrubias. Hay otros, como Antonio Agundez, que se autonombra el candidato de las izquierdas, pero con el solo hecho de que traiga pegado de la gamarra a su querido hermano Narciso, se le limita en la lógica perspicacia del ciudadano, que ni olvida, ni perdona el pasado devastarte de Chicho por el gobierno local, concluyo en el Presidio. Se calentó como una refulgente plancha, el edil Venustiano Pérez Sánchez, que armo un sacro santo comeliton para demostrar que puede hacerle frente al gallo de los panistas, Carlos Mendoza Davis. Estos son los pesados para la gubernatura. Habrá otros que todavía no se animan a decir que la quieren. Y en estos puede estar el joven empresario Carlos Estrada Talamantes, que levanta suspiros en amplios sectores de la clase alta, por tener a uno de los suyos en la conducción de este estado. Esto es de lo que se habla en este estado, desde el amanecer de este enigmático 2014.

CEMENTERIO

Ese día 15  de diciembre de 1890, en los astilleros de San Francisco California, el Almirante John Crawford, tuvo una epifanía: voy a morir pronto. Su corazón dio un vuelco, pero valiente como era, dijo hacia sus silencios. Que sea lo que sea. Y clavo la mirada en uno de los cincuenta marineros que la empresa Golden minning, le había entregado esa mañana. Ese negro, no me gusta. Tiene el rostro de la maldad. Y tenía razón el capitán: Tomas Jaques, no era bueno. Al día siguiente, el diez y seis Crawford, emprendería una larga travesía a bordo del Golden City, un barco de manufactura inglesa. No era un barco cualquiera, en sus orígenes había sido construido como acorazado por la Marina Real Inglesa. Y después de diez años fue comprado por el consorcio minero integrado por capitales ingleses y españoles, para trasladar oro de San Francisco California a Puerto Vallarta Méjico. Habilitado con una amplia bodega que podía trasladar sin ningún problema 100 toneladas de carga. Su descripción somera es desplazamiento 1770 t. Eslora, 68,58 m, Manga, 10,97 m y Calado 4,42 m. Propulsión • 2 máquinas de vapor de doble expansión, 4 calderas, 2 hélices, Potencia 2500 hp, Velocidad, 17,5 nudos Y una Autonomía de 7000 min a 10 nudos. El Golden City, una nave hermosa, imponente. Y ahí frente al timón el gran Almirante inglés John, con una trayectoria sin par, en Africa, América, Un lobo de los siete mares. Y ese día diez y seis, a las seis de la mañana, dejo el puerto californiano, conduciendo magistralmente el Golden City, en un viaje con duración de cincuenta días, con destino final Puerto Vallarta, transportando 75 toneladas de oro puro. John, paso toda la mañana trazando su viaje. De vez en cuando levanta la vista y ve en el horizonte esa hermosa ciudad, la que acogió como su  hogar y en donde vive su esposa Jocelyn, su hijo Marty de diez años. Por la noche cena en compañía del contramaestre. Cangrejos a la vinagreta y un troncho de salmón, acompañado de deliciosos espárragos. Una copa de vino. Y una charla intrascendente. Y a dormir. Y lo hizo plácidamente ya sin temores, sin miedos, solo con el deseo de cumplir su misión. Y el retorno a casa. Los días después, la misma rutina. El diez y siete de diciembre la nave en su marcha incesante cruzo por Ensenada, densas nubes, cubrieron la ruta y un frio calaba en los huesos. John,  salió temprano solo un rato de su cabina y disfrutaba su té de Manzana Canela, observando las pequeñas casuchas que se levantaban en torno a ese puerto natural. Más tarde vio un grupo de ballenas grises que seguían su misma ruta, en busca de aguas cálidas. El almirante pensaba en su esposa, su hijo. Y aspiraba ese aroma único, del viento, la brisa. Y esos espectáculos de la ballena en sus danzas amorosas y los sonidos, cual arpegios de una pieza musical de excelencia. (Continuara)

VIDAS PARALELAS

La SCT mantiene en vilo, una bromita rezagada del Día de los inocentes: aplicar un cobro en el tramo desviatorio en Todos Santos, ja, ja, ja. Ilusos…Mañana los diputados echaran la casa por La Panga, en un desayuno con los comunicadores. Fueron los únicos que se acordaron de nuestro gremio, en eso de las convivencias…Y amigos por hoy es todo, aquí estamos de nuevo en este dos mil catorce, gracias por leernos…Y no olviden; hagan el bien y sean felices.